Borbela de Luz es una de las más cuerdas locuras de Ignacio Iglesias Gil. Todo comenzó con una pequeña finca familiar, una esquina de monte por el que discurre un riachuelo. Siguió con la restauración de un olvidado molino de agua y con el impulso de compartir las sensaciones percibidas. Los primeros contagiados fueron familiares y amigos. La experiencia de Ignacio como promotor de selectos proyectos inmobiliarios y la locura de algunos allegados hicieron el resto. Así nació Borbela de Luz.